Psicoblog
Co-dependencia:
Cuando dependemos de otro hay siempre desdicha, porque la dependencia patológica es esclavitud. La otra persona, se vuelve entonces demasiado poderosa para nosotros y empezamos a necesitar vengarnos de maneras muy sutiles.
Este tipo de dependencia mata la libertad y el amor.
El amor necesita espacio donde el otro no interfiera, no invada. Son temas delicados, donde el establecimiento de limites y el darse cuenta, son primordiales. Son cuestiones que abordamos dentro del trabajo psicoterapéutico.
La meditación:
Deja que el silencio construya tus frases.
Que el alma grite de gozo.
Que tu cuerpo se descargue y se vuelva ligero y esponjoso.
Que el espíritu se eleve.
Deja que el silencio se abra entre las multitudes de tantos pensamientos, echando por tierra nuestros acorazados muros tan aislados.
Para hacernos sentir parte de la maravillosa unidad de la que partimos.
Uno es lo que ama. No lo que le ama.
Todos somos el mismo. Como las células del cuerpo, solo que no vemos el cuerpo, así como los peces no ven el mar. Y nos envidiamos, nos hacemos daño, nos odiamos. ¡Qué estupidez!, una célula del corazón odiando a una célula del pulmón!.
Cassier en “LOS TRES” de la peli El ladrón de orquídeas.
Nada es lo que parece.
Te crees que estás de paso y que de nada queda huella. No te olvides que eres un mensaje en una botella. Para, no corras tanto, si es a ti mismo al que estás buscando.
Es cuestión de ser y no solo estar. Ver y comprender en lugar de juzgar. ¿De dónde sale tu arte?. Que sabio es el que comparte.
Me gustaría daros a todos la enhorabuena por vuestra constancia y entrega al trabajo bien hecho. Todo ello síntoma de Salud desde donde poder permitirnos ese momento del día donde podemos SER para amarnos en abundancia.
La continuidad, de la que tanto hablamos, necesaria, no tanto con la técnica o el “maestro”, sino desde la importancia de nuestro sentir.
Gracias por vuestras semillas. Ya están en el corazón uni-versal.
Entregado!.
Y muchísimas gracias a todos por vuestros comentarios, por tantos buenos feedback que habéis aportado a mi pagina. Por todo vuestro cariño, ese que todo lo cura.
Aquí, a continuación, comparto desde mi experiencia:
Ponemos nuestro foco de atención en esa Energia llamada aire.
Soltando y tomando, dando y recibiendo, las idas y las vueltas que producen el movimiento de la vida.
Limpiando, girando, sanando, no retenemos.
Siempre acabamos soltando.
Sin apego, conectamos con la fuente abundante.
Estamos confiad@s y segur@s que una nueva inhalación aparecerá a continuación.
Como el sol cada amanecer, amanecemos a nuestro SER infinito de posibilidades.
Cada vez más presentes porque cada vez percibimos más nuestra respiración .
Al principio, el mantra ea ea ea nos acuna y nos consuela
y, es, que a veces, es mucho el sufrimiento y es esta quietud la que nos sostiene huyendo de tanta actividad mental.
Porque..quién soy cuando no estoy haciendo?
Luego, será el silencio, la pura Energía, nuestro esencial aliento.
La Paz, el sosiego, la dicha.
Inhalamos y nacemos y exhalamos y morimos, cada instante, de cada vida, de cada dia.
Nuestro cuerpo se convierte en un puro filtro para recibir el alimento de nuestra consciencia: el Prana
Meditando nadamos la inmensidad de ese aire flotando ligeros y blanditos en la certeza de la tierra que recibe todo nuestro exceso, nuestros pesos y locuras.
No es necesario pelear. Hay para todos, todo es de todos, SOMOS TODO y podemos llegar al unísono en una única respiración a una melodía en la que todos somos UNO.
Uno con todo dejamos que el universo nos respire, al encuentro de nuestro propio ritmo.
Conectamos entonces con el pulso universal y único, atentos, entregad@s .
Ya no somos mar, somos la marea que entra y sale de la orilla: in out, nadamos el aire, meditamos, y todos compartimos la abundancia con facilidad, gozo y gloria.
Entramos en la noche profunda y tranquila de nuestra alma, en ese instante exquisito, íntimo, interior.
Como cuando la música cesa…termina esa peli que tanto nos ha conmovido…cuando nos separamos tras hacer el amor…y sentimos cada célula de nuestro cuerpo que se impregna de la magia del momento único, irrepetible y sagrado paladeo.
Qué seria de la música sin los silencios, del dolor sin el placer, de la noche sin el día.
La meditación para mí, es esa pausa, ese intervalo, donde me encuentro con el Ser Superior, a cada instante.
María Jesús Granda.
NAMASTE